jueves, 12 de abril de 2012

¡Parada!














Envuelta en un laberinto
de preguntas incontestables,
con cientos de lamentos
para nada envidiables.
Transito cada minuto
sin un pensamiento agradable,
que me ilusione un momento
con la idea de lo realizable.
No recuerdo hace cuanto
este orgullo abominable
como hoy,  doliera tanto,
que hasta parece incalculable.
¡Parada, necesito asueto!
Bajarme es indispensable,
porque perdida me siento
sin brújula orientable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario