Esto, más allá de reflejar regionalismos, pretende elogiar el esfuerzo, trabajo, sabiduría, valentía, amor y pasión de los jugadores que pertenecen a cada una de las referidas selecciones, ya que con estas características, valores y principios, se ha avanzado a unos cuartos de final, derrotando a potencias - en todos los órdenes - como Italia, Francia, Estados Unidos y otros.
El próximo viernes empiezan los cuartos de final y estaremos prontos a entrar en la recta final de este mundial, faltando lo más difícil. Así, los equipos latinos tendrán que enfrentarse con tres seleccionados europeos que han tenido un mundial casi perfecto: Alemania, Holanda y España, no obstante, no es imposible que podamos seguir avanzando, pese a ellos, para que la copa se vista de América latina – mejor si es albiceleste – o inclusive, por qué no, de África.
Éste, que es el deseo de muchos, como yo, va más allá de recibir una copa. Significa dar un baño de alegría a países que de ganar, representarán la alegría no solo de una nación, sino de dos continentes – el Africano o el Americano – que viven día a día inmersos en los miles de problemas socio – económicos y políticos, y si bien, una victoria no solucionará los problemas, si los alivianará y al menos, en este aspecto, será motivo de alegría. Alegría que merecemos.
Muy bueno Nelva y sobre todo por el contenido social que al final como dices tiene esto para nuestros países sub desarrollados y sumidos en tanta desigualdad de oportunidades.
ResponderEliminarSaludos,
Marcela T.
Así es Ing. Marcela. Esperemos que podamos disfrutar de esa alegría.
ResponderEliminarGracias por su comentarios.
Un abrazo.